El Watergate de Spitzer

Despues que la prensa le saco el jugo al escandalo del gobernador Eliot Spitzer, han surgido entre la prensa independiente, diversas hipotesis sobre la caida del exitoso politico democrata. La gran prensa se centro en el analisis de su personalidad, el caracter "autodestructivo" y las ironias de su caida. Otros como The Nation y Asia Times, ven el problema de otra forma.

Segun ellos, independientemente de las contradicciones personales del gobernador, se preguntan como cayo Spitzer? y sobre todo porque?. Y otros lo llaman el “Watergate” del Spitzer. En todo caso muchos coinciden que fue una caso con un fuerte transfondo politico por que el gobernador se enfrento al poder economico y sus aliados en la Casa Blanca publicamente, responsabilizandolos de los fraudes finanacieros que han generado la crisis actual en el sistema.

Segun ellos Spitzer como fiscal del Estado se fue contra los peces gordos de Wall Street responsables de las estafas de la “burbuja” tecnologica, como ENRON y personalidades de Wall Street, como el presidente del AIG insurance group, Hank Greenburg, estaban entre sus detractores. Lo cierto es que Spitzer hizo su carrera politica enfrentandose a los sectores corruptos del sistema financiero.

Como gobernador del segundo estado mas importante del pais y centro de la industria financiera de la nacion, Spitzer empezo a denunciar la complicidad de Bush con sus amigos de Wall Street responsables de la crisis de los prestamos hipotecarias a costa de los pequeños propietarios y contribuyentes del pais.

Todo indicaba que hiba hacer lo mismo que hizo con los responsables de las estafas del los “dot coms”, con los responsables de los dudosos prestamos hipotecarios, que desinflaron la burbuja de los bienes raices en los ultimos años. Eso habria puesto muy nervioso a Wall Street que es responsable directo del caos financiero, que se ha armado en torno al problema de los prestamos mal hechos por la banca.

Spitzer hizo publico su protesta por la forma como el gobierno de Bush y el gobierno federal estaba bloqueando a los Estados de intervenir en proteccion de la victimas de la crisis del sistema hipotecario del pais.

Poco antes de su caida Spitzer publico un articulo en The Washington Post titulado: "Predatory Lenders' Partner in Crime: How the Bush Administration Stopped the States From Stepping In to Help Consumers." (Prestamistas depredadores aliados con el crimen: Como el Gobierno de Bush bloqueo a los estados para que no intervengan a favor de los prestatarios). En el detalla las maniobras de Bush con Wall Street para encubrir a los responsables de los delitos cometidos por la industria financiera. Este articulo habria sido el detonante que le costo su carrera politica.

De acuerdo a la revista The Nation, Spitzer habria sido victima de una cuartada. Basta con revisar como detectaron los federales las actividades ilicitas de Spitzer con las prostitutas de un web site que brindaba esos servicios. Tal parece que fue a traves de una transferencia bancaria que realizo Spitzer a nombre de un tercero y que los funcionarios del banco consideraron sospechosa y por lo tanto la reportaron a lIRS, de acuerdo a la ley Patriotic Act, en la cual se indica que todo aquel que mueve diez mil dolares o mas debe ser reportado si se considera que los fondos van a personas sospechosas. Dicha ley ironicamente fue creada para detectar la movilizacion de fondos de los terroristas pero ahora tambien se usa para investigar a personalidades y politicos como Spitzer.

La pregunta que se hace The Nation es si el banco denuncio la transaccion de Spitzer por que era sospechosa o por que toda movida de Spitzer tenia que ser reportada para que al menor error sea usada en su contra.

En la actualidad Spitzer no esta acusado de crimen alguno. Por lo general en casos de prostitucion los usuarios del servicio rara vez son acusados pero el dia que fue denunciado Spitzer los republicanos pidieron su renuncia y amenazaron con denunciarlo y llevarlo a los tribunales.

Ahora ya no hay Spitzer y Wall Street duerme tranquila porque no hay quien le ponga el cascabel al gato.